El alcalde de Candelaria Loxicha, Román Ruíz Bohórquez, fue asesinado este martes en su hogar, en un ataque que ha conmocionado a la comunidad y al estado de Oaxaca. Este es el segundo asesinato de un presidente municipal en menos de diez días en el sur de México, lo que refleja un creciente clima de violencia en la política local.
El gobernador de Oaxaca, Salomón Jara, confirmó la noticia a través de sus redes sociales, expresando sus condolencias a la familia del edil y asegurando que la Fiscalía ya se encuentra trabajando en la investigación del caso. "Lamentamos este hecho y enviamos nuestro más sentido pésame a sus familiares. Vamos a garantizar que este suceso no quede en la impunidad", escribió Jara, quien pertenece al gobernante Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
Según medios locales, el asesinato de Ruíz Bohórquez ocurrió durante la noche, cuando sujetos desconocidos lo atacaron con un arma blanca en su residencia. El alcalde, electo bajo la organización local Planilla Blanca, también era profesor en la Universidad Autónoma Comunal de Oaxaca (UACO), que expresó su tristeza ante el homicidio del docente.
A través de un comunicado, la UACO extendió sus condolencias a la familia y a la comunidad, recordando la visión de Ruíz Bohórquez por una vida más digna para todos. "Que tu camino sea bendecido, querido maestro", manifestó la universidad, destacando la orientación y apoyo que brindó al proyecto educativo.
Este crimen se suma a la creciente preocupación por la violencia política en México. El 6 de octubre, el alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos, fue decapitado, un suceso que aún no ha sido esclarecido. Estos asesinatos reflejan un patrón alarmante, ya que se considera que las elecciones del pasado 2 de junio fueron las más violentas en la historia reciente del país, con más de 30 aspirantes a cargos públicos asesinados, aunque el Gobierno solo ha reconocido oficialmente el asesinato de 12 candidatos.
Los recientes hechos evidencian que la violencia política sigue presente, y la comunidad exige respuestas y acciones concretas para proteger a sus líderes y garantizar la seguridad en la región. La ciudadanía y las autoridades se encuentran en alerta ante el aumento de la inseguridad y la falta de justicia en estos casos.