Decenas de personas, en su mayoría mujeres se unieron en redes sociales para hacer honor a Ingrid Escamilla, compartieron imágenes hermosas de paisajes, entre otras cosas con la finalidad de que las terribles imágenes de su muerte quedarán perdidas en la red.
Ella tenía 25 años, fue víctima de feminicidio, era viajera, aventurera, fue luz y sonrisas: eso es lo que debemos recordar sobre ella, no las atroces imágenes.
Tenía una hermana gemela y siempre la acompañaban sus mascotas: Vodka, un husky siberiano, y Frida, una pequeña pug.
El 9 de febrero fue asesinada de la forma más brutal imaginable, presuntamente por su entonces pareja, Erick, de 46 años, quien confesó ante la policía lo que había hecho.
Las terribles imágenes se compartieron rápidamente en chats privados, en medios de comunicación y redes sociales.