Cientos de salvadoreños de todo el país llegaron este sábado a la localidad de Antiguo Cuscatlán (suroeste) para ser parte de la tradicional celebración de los Santos Niños Inocentes en la que, entre otras cosas, agradecen por los favores concedidos y aprovechan para presentar peticiones.
Los salvadoreños, en su mayoría feligreses católicos, se reunieron en la iglesia de Antiguo Cuscatlán con imágenes de los Santos Niños Inocentes en señal de agradecimiento y para hacer una petición, como mejorar su salud o la salud de un pariente, con la esperanza de verla hecha realidad.
Las actividades incluyen un acto religioso y una procesión por las principales calles de la turística localidad. Durante el corto recorrido de la procesión, encabezado por la imagen de la virgen Santa Juana, los participantes aprovecharon para pedir también por los niños desprotegidos del país y del mundo.
Liliana González, una de las presentes, dijo a periodistas que la tradición de participar en esta celebración se la inculcó su madre y comentó que en esta ocasión asiste para agradecer porque su esposo "pudo salir de una situación económica muy delicada" y aprovechar para pedir que su familia "cuente con buena salud" en el 2025.
El padre Manuel Campos compartió a EFE que el mensaje de la iglesia en el marco de esta celebración es "mantener siempre activa la lucha por defender la vida en todas sus manifestaciones de manera que como creyentes católicos y personas de buena voluntad luchemos porque los valores del reino de Dios lleguen a todas las personas".
Según la Iglesia católica, Santa Juana salvó la vida de muchos niños menores de dos años, quienes serían asesinados por órdenes del rey Herodes al enterarse de que nacería un nuevo rey.
Esta festividad data del año 1713 y era celebrada por una cofradía integrada por capitanas, mayordomos y tenaces.