Coneval alerta sobre desigualdad y pobreza entre las mexicanas
En México, las mujeres enfrentan desafíos persistentes en el acceso a servicios esenciales y oportunidades económicas, puesto que, de cada 100 mujeres, en promedio 49 no tienen acceso a la seguridad social y 37 carecen de servicios de salud
Según el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), en 2022, el 49.1% de las mujeres carecía de acceso a la seguridad social, lo que equivale a 33 millones de personas. Además, el 37.5% no contaba con servicios de salud adecuados, reflejando una tendencia al alza desde el 14.1% registrado en 2018.
La pobreza sigue afectando a una proporción significativa de la población femenina. De los 67.1 millones de mujeres en el país, el 36.9% se encontraba en situación de pobreza en 2022, una disminución respecto al 42.6% de 2018. Sin embargo, el 7.2% de las mujeres aún vivía en condiciones de pobreza extrema, lo que representa a 4.8 millones de personas.
La participación económica de las mujeres ha mostrado incrementos en los últimos años
Entre 2018 y 2022, la tasa de participación económica de las mexicanas fluctuó entre el 40.0% y el 46.2%. No obstante, al cuarto trimestre de 2022, más de la mitad de las mujeres en edad laboral no estaba empleada, y persistía una brecha de participación económica de 30.3 puntos porcentuales en comparación con los hombres.
La sobrecarga de responsabilidades domésticas y de cuidados no remunerados recae principalmente en las mujeres, limitando su inserción en el mercado laboral formal. Esta situación las lleva a buscar empleos flexibles o informales, generalmente de menor calidad, e incluso a interrumpir sus trayectorias profesionales. Estos factores restringen su capacidad para generar ingresos propios y alcanzar autonomía económica
México destaca en América Latina y el Caribe por tener una de las mayores diferencias en participación económica entre géneros. En 2024, la brecha salarial entre hombres y mujeres en México se situó en un 16%. Esto significa que, por cada 100 pesos que gana un hombre, una mujer percibe 84 pesos
En términos de educación, el rezago educativo afecta al 19.5% de las mujeres, una cifra que ha permanecido constante entre 2018 y 2022. Además, el 18.2% carece de acceso a una alimentación nutritiva y de calidad, y el 17.7% no dispone de servicios básicos en su vivienda. Estas carencias impactan negativamente en su calidad de vida y limitan sus oportunidades de desarrollo.
La brecha salarial de género persiste en México. En el segundo trimestre de 2023, los hombres ocupados reportaron un ingreso laboral real mensual de $7,528.17, mientras que las mujeres percibieron $5,935.87, es decir, el ingreso de los hombres fue aproximadamente 1.3 veces mayor al de las mujeres.
Las mujeres se concentran en sectores de menor productividad y enfrentan condiciones laborales más precarias. El empleo subordinado sin pago es hasta el doble de frecuente en las mujeres (8%) respecto de los hombres (4%), especialmente en aquellas de 65 años o más y en situación de pobreza
La falta de acceso a servicios de salud y seguridad social, junto con la carga de trabajo no remunerado, perpetúa las desigualdades de género en México.