Ebrahim Raisí será el nuevo presidente de Irán, al haber ganado las elecciones con el 62 por ciento de las preferencias.
El jefe del poder judicial, ultraconservador y clérigo, logró casi 18 millones de votos, un resultado que se anunciaba difícil de modificar.
El Ministerio iraní del Interior informó este sábado que, sus dos principales rivales, Mohsen Rezaí, el ex jefe de la Guardia Revolucionaria, y Abdolnaser Hemmatí, ex gobernador del Banco Central, obtuvieron 3.4 y 2.4 millones de votos, respectivamente; mientras que un 14 por ciento se clasificaron como votos nulos.
Este fue el proceso electoral con la menor participación en la historia de la República Islámica, con 48.8 por ciento.