El reparto de utilidades es un derecho laboral establecido en la Ley Federal del Trabajo (LFT) que asegura que los trabajadores reciban una parte de las ganancias generadas por las empresas. Este beneficio reconoce el papel fundamental de los empleados en la producción de dichas utilidades.
De acuerdo con la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), el monto a repartir se determina considerando dos factores: la mitad corresponde a los días laborados por el trabajador y la otra mitad al salario que percibió durante el año. Para cumplir con esta obligación, los empleadores deben distribuir las utilidades en las siguientes fechas:
Todos los trabajadores de planta y eventuales que hayan laborado al menos 60 días durante el año, así como aquellos con licencia de maternidad o incapacidad temporal, tienen derecho a recibir este beneficio. Además, quienes ya no laboren en la empresa pero cumplan con los requisitos, también pueden reclamar su parte dentro de un plazo de un año.
Sin embargo, hay excepciones. Las empresas que no están obligadas a repartir utilidades incluyen:
Por otro lado, todas las unidades económicas dedicadas a la producción o distribución de bienes o servicios, ya sean personas físicas o morales, están obligadas a cumplir con esta disposición, siempre que tengan empleados bajo su servicio.
Si trabajaste el tiempo suficiente y cumples con los requisitos, es importante que estés al tanto de las fechas para recibir tus utilidades o reclamar el pago pendiente. Este ingreso adicional puede ser una gran ayuda para tus finanzas y planificación personal.