Durante la inauguración de un cuartel de la Guardia Nacional en Bavispe, Sonora, el presidente López Obrador aseguró que la masacre del 4 noviembre pasado, donde perdieron la vida integrantes de la familia LeBarón, no quedará impune.
"Vamos avanzando en la investigación, ya se informó a los familiares sobre lo realizado y vamos a continuar, no está cerrado el caso, vamos a conocer la verdad y se tiene que castigar a los responsables", manifestó.
A nombre de los familiares, Kenneth Miller agradeció la visita presidencial y pidió que "llegue justicia a todos los que no tienen voz, es lo que pido y pedimos al presidente".
Por su parte, el Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, indicó que la investigación aún no está cerrada.
"Aunque es difícil estar frente a los familiares de las víctimas rindiendo cuentas, estamos frente a este desafío, dando la cara", señaló.
Julián LeBarón criticó las intenciones de Alfonso Durazo para contender por la gubernatura de Sonora, cuando el responsable de la seguridad no puede reducir la cifra de muertos en el país.
"No sé cómo puede pedirle apoyo a los sonorenses, cuando este problema, en su casa, no se ha resueltoa", aseveró Julián LeBarón.
El presidente prometió regresar el 15 de diciembre a la comunidad de Bavispe para informar de avances de las investigaciones.