Google, la gigante tecnológica conocida por su motor de búsqueda y mapas, ha anunciado que, en cumplimiento con órdenes del presidente Donald Trump, el nombre del Golfo de México será sustituido por "Golfo de América" en su plataforma de mapas dentro de Estados Unidos.
La decisión forma parte de una política de la empresa de actualizar los nombres geográficos según fuentes gubernamentales oficiales, como lo explicó este martes a través de un comunicado en la red social X.
"Hemos recibido algunas preguntas sobre los nombres en Google Maps. Tenemos una práctica de larga data a la hora de aplicar cambios de nombre cuando se han actualizado en fuentes gubernamentales oficiales", señaló la compañía, refiriéndose al Sistema de Información de Nombres Geográficos (GNIS) de Estados Unidos, el cual registra las nomenclaturas oficiales del país.
Este cambio no solo afecta al Golfo de México, sino también al Monte Denali, la montaña más alta de Alaska, que volverá a ser conocido como Monte McKinley en EE. UU. La decisión responde al interés de Trump por restaurar nombres históricos en lugar de denominaciones indígenas o de uso internacional. El mandatario justifica la medida como un reconocimiento al expresidente William McKinley, a quien admira por su enfoque proteccionista y colonialista.
Sin embargo, Google aclaró que estos cambios solo serán visibles para los usuarios de Google Maps dentro de Estados Unidos. En el resto del mundo, la plataforma continuará mostrando ambas denominaciones: Golfo de México y Golfo de América. "Cuando los nombres oficiales varían entre países, los usuarios de 'Maps' ven el nombre oficial local. En el resto del mundo, todos ven ambos nombres. Esto también se aplica en este caso", puntualizó la compañía.
El cambio ha generado polémica en redes sociales y entre expertos en geografía, quienes argumentan que la denominación de "Golfo de México" tiene siglos de uso y es reconocida internacionalmente. No obstante, Trump sigue defendiendo estas medidas como parte de su estrategia para "fortalecer la identidad estadounidense".
La iniciativa de cambiar el nombre del Golfo de México fue una de las primeras acciones del presidente tras asumir el cargo el pasado 20 de enero. Con esta decisión, Trump busca dejar su huella en aspectos simbólicos del país, argumentando que dichos cambios representan un "regreso a los valores y la historia original de Estados Unidos".
Mientras tanto, la actualización en los mapas de Google subraya la influencia de las políticas gubernamentales en las decisiones de las grandes tecnológicas, y podría abrir debates sobre la neutralidad de estas plataformas en temas geopolíticos y culturales.