París, 22 feb (EFE).- El hombre que hoy cometió un atentado en la ciudad de Mulhouse en el que mató a un paseante e hirió a tres agentes municipales es un argelino de 37 años que estaba fichado por terrorismo con las facultades mentales perturbadas al que Francia había intentado expulsar repetidamente a su país, que no lo aceptó.
El ministro del Interior, Bruno Retailleau, se indignó en una entrevista al canal TF1 de que el autor del ataque -detenido inmediatamente después-, aunque había sido condenado por apología del terrorismo y "tenía problemas psiquiátricos", se encontraba "en libertad en el territorio francés" con una orden de expulsión del país.
Retailleau insistió en que "hay que cambiar la ley para proteger mejor a los franceses" y dijo que lo que quiere es instaurar un régimen de "retención de seguridad" para los perturbados mentales "peligrosos" a su salida de prisión.
"Cada año -denunció- hay terroristas que quedan en libertad porque han purgado sus penas. Ha llegado la hora de cambiar las reglas para proteger a los franceses. Es mi trabajo".
Para este ministro del partido de la derecha tradicional, Los Republicanos (LR) "una vez más es el terrorismo islamista el que ha golpeado, y una vez más los desórdenes migratorios están en el origen de este ataque".
Se refería así al hecho de que pese a la orden de expulsión que se había dictado contra él, eso no se pudo ejecutar porque Argelia rechazó las diez demandas que habían hecho sus servicios a ese país.
Por eso, quiere que Francia abra un pulso con ese país a cuenta de un acuerdo bilateral de 1968 que da condiciones favorables a los argelinos para entrar y estar en Francia y lo justificó así: "Hemos tendido la mano a Argelia y ¿qué hemos obtenido a cambio?"
Según el relato de la Fiscalía Nacional Antiterrorista (PNAT), que ha asumido la investigación, el sospechoso, Brahim A., atacó a varios policías municipales en la plaza del Mercado de Mulhouse, en el centro de esta ciudad cercana a la frontera con Alemania con algo parecido a un arma blanca gritando en árabe "Alá Akbar" (Alá es el más grande).
Un hombre de 69 años que trató de interponerse es el asesinado y tres agentes municipales resultaron heridos. El autor fue arrestado por la policía en una calle próxima.
La PNAT ha abierto una investigación por los delitos de asesinato terrorista y tentativa de asesinatos terroristas de personas detentoras de la autoridad.
El presidente francés, Emmanuel Macron, además de manifestar "la solidaridad de la nación" con la familia del fallecido, insistió en su "determinación" y la de su Gobierno para seguir trabajando con el objetivo de "erradicar el terrorismo" de Francia.