Inversión en infraestructura podría alcanzar 2 billones de pesos
Los constructores han iniciado un diálogo con el gobierno de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, para abordar las 650 necesidades de infraestructura identificadas en el país.
Luis Méndez Jaled, dirigente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), destacó que estas necesidades requieren una inversión que podría ser hasta tres veces mayor que los 600 mil millones de pesos asignados en el presupuesto federal de 2024, lo que equivaldría a casi 2 billones de pesos.
En una reciente conferencia, Méndez Jaled presentó propuestas para impulsar proyectos en infraestructura turística, un sector que representa alrededor del 8.5% del producto interno bruto (PIB) del país. Subrayó que hay un diálogo activo con funcionarios del nuevo gobierno y que, a solicitud de Sheinbaum Pardo, la CMIC ha entregado 80 propuestas al próximo titular de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT).
Estas propuestas abarcan diversas áreas como energía, financiamiento, movilidad urbana y vivienda.
Méndez Jaled enfatizó la importancia de la participación del sector privado en estos proyectos. La presidenta electa ha mostrado apertura hacia una colaboración más intensa con la iniciativa privada, destacando que lo fundamental es garantizar transparencia y competencia en los procesos. "No importa cómo se llamen las asociaciones público-privadas, lo más importante es que exista transparencia y se cuiden los plazos de ejecución", afirmó.
El dirigente también mencionó que el crecimiento del PIB ronda el 2.7%, y si se logra estabilidad económica, se podrán realizar inversiones significativas en infraestructura. Sin embargo, advirtió que sin relocalización, las necesidades podrían aumentar hasta un 5%, pero el fenómeno del nearshoring podría elevar este requerimiento a un 6 o 7%. Este fenómeno implica trasladar cadenas de suministro más cerca del mercado estadounidense, lo que podría generar una mayor demanda de infraestructura.
Un punto crítico señalado por Méndez Jaled es la reducción del presupuesto público para infraestructura en 2024, que disminuyó un 27% al pasar de 800 mil millones a 600 mil millones de pesos.
Esta situación genera preocupación entre los constructores, ya que se estima que el sector solo crecerá un 1% al cierre del año, cifra inferior al promedio del 2% observado en periodos anteriores. El dirigente recordó el fuerte retroceso del sector durante la pandemia, donde se registró una caída del 17%.
En cuanto a la reforma del Poder Judicial ya aprobada, Méndez Jaled consideró que es un tema consumado y ahora solo queda esperar las leyes secundarias. Hizo hincapié en la necesidad de priorizar el ejercicio del servicio judicial de carrera y abogó por la profesionalización y selección adecuada de jueces con alta capacidad y experiencia.
La inversión en este ámbito no solo es crucial para cerrar brechas sociales y económicas sino también para fomentar el crecimiento sostenible.
La falta de transparencia en la asignación y ejecución de recursos ha sido un tema recurrente en discusiones sobre infraestructura pública, lo cual resalta la necesidad de establecer mecanismos claros que permitan un seguimiento adecuado del gasto.
Con el objetivo de mejorar la situación actual y responder a las crecientes demandas de infraestructura, los constructores esperan trabajar estrechamente con el gobierno para asegurar que se implementen políticas efectivas y se realicen las inversiones necesarias. A medida que se avanza hacia el nuevo ciclo gubernamental, las expectativas son altas respecto a cómo se abordarán estos desafíos críticos para el desarrollo económico y social del país.