Japón levanta estado de emergencia
Se levantó el estado de emergencia en Japón por la epidemia de Covid-19 incluidas las últimas regiones del archipiélago y Tokio.
El primer ministro japonés, Shinzo Abe, pidió a la población tener cautela y adaptarse a "una nueva normalidad" para seguir evitando tres situaciones específicas: los lugares cerrados o repletos de gente y los contactos cercanos, ya que el país tiene 126 millones de habitantes y registraba hasta el domingo 16 mil 581 casos acumulados de coronavirus desde el inicio de la pandemia, una cifra que aumentó en sólo 31 contagios en las últimas 24 horas, y 830 decesos.
"Si bajamos la guardia, la infección se propagará rápidamente, debemos mantenernos atentos", advirtió.
El estado de emergencia fue declarado el 7 de abril en Tokio y seis regiones más, antes de ampliarlo a todo Japón en un contexto de fuerte aceleración del número de nuevos casos diarios de Covid-19 desde fines de marzo.
Inicialmente prevista hasta el 6 de mayo, la medida fue prolongada hasta el 31 de este mes, aunque el descenso en los nuevos casos incitó al gobierno a levantarla de manera anticipada el 14 de mayo en 39 de las 47 prefecturas del archipiélago, y el jueves en Kioto y Osaka.
En el caso de Japón, el estado de emergencia no permite al país imponer confinamientos como en Europa o Estados Unidos, sino simplemente aconsejar a la población quedarse en sus hogares y a los comercios mantener las cortinas bajas, lo que ha sido la tónica en las últimas semanas en todo el país.
Es necesario crear una nueva forma de vida, debemos cambiar nuestra manera de pensar a partir de ahora", dijo.
La paralización casi por completo de la economía entre los principales socios comerciales del archipiélago y el descenso del consumo en el país a causa del estado de emergencia, sumado a los efectos del reciente aumento del IVA, decretado a finales de 2019, llevó a Japón en su primera recesión desde 2015.
El ministro presentó un plan para recuperar la economía de un monto de un billón de dólares, lo que incluye la distribución de 100 mil yenes por habitante para impulsar el consumo.