La Quebrada, un icónico acantilado de Acapulco, se prepara para conmemorar su 90 aniversario de una manera única: su imagen será impresa en cuatro millones de boletos de la Lotería Nacional
Este evento no solo destaca la belleza del acantilado, sino que también busca reforzar su estatus como un atractivo turístico esencial. La imagen del famoso risco, conocido por sus espectaculares clavados, estará presente en los boletos que se sortearán en el primer trimestre de 2025, llevando un pedazo de Acapulco a cada rincón del país.
Desde su creación en 1934 como espectáculo turístico, La Quebrada ha atraído a millones de visitantes. Se estima que anualmente recibe alrededor de 300,000 turistas, quienes se sienten atraídos por la valentía y habilidad de los clavadistas que se lanzan desde alturas impresionantes.
Este lugar no solo es un símbolo de la cultura local, sino también un importante motor económico para Acapulco, especialmente tras los recientes desastres naturales que han afectado la región
El secretario de Turismo municipal, Noé Peralta Radilla Herrera, subrayó que esta colaboración con la Lotería Nacional representa un esfuerzo significativo para promover Acapulco y revitalizar su economía a través del turismo.
La promoción de La Quebrada en los boletos es una estrategia que busca no solo atraer más visitantes, sino también rendir homenaje a la rica historia y cultura del puerto. Este esfuerzo llega en un momento crucial, ya que Acapulco está en proceso de recuperación tras el impacto de dos huracanes devastadores.
La Quebrada es conocida internacionalmente por sus audaces clavadistas que se lanzan desde un acantilado de 45 metros de altura hacia un canal estrecho y profundo
Los clavadistas deben calcular con precisión el momento adecuado para saltar, teniendo en cuenta las condiciones del mar y las olas. Este espectáculo no solo es una muestra de destreza física, sino también una tradición que ha pasado de generación en generación.
El origen del nombre "La Quebrada" se remonta a finales del siglo XVIII, cuando se intentó abrir un canal para permitir la entrada de aire fresco al puerto y combatir enfermedades como el cólera. Aunque el proyecto quedó inconcluso por falta de recursos, el nombre perduró y se convirtió en sinónimo del famoso acantilado. A lo largo de los años, este lugar ha evolucionado hasta convertirse en un destino turístico clave en México.