México dejó claro que no ha aceptado recibir a migrantes solicitantes de asilo en Estados Unidos, esto luego de que ayer la administración de Trump informó sobre la restitución del programa "Quédate en México", una iniciativa terminada por su predecesor Joe Biden que obligaba a los solicitantes de asilo no mexicanos a esperar en el país latinoamericano la resolución de sus casos en la nación norteamericana.
"Para que haya un acuerdo de tercer país (seguro) tiene que haber una firma del país (que acepte recibir a los migrantes)", dijo Claudia Sheinbaum, presidenta de México.
"Nosotros, en este caso, lo que estamos haciendo es (...) ofrecer una atención humanitaria (a migrantes retornados desde Estados Unidos) y se les ofrece que si de manera voluntaria quieren regresar a sus países, existen mecanismos para ser repatriados", agregó.
El lunes, Trump prometió acabar con la migración ilegal, incluida la reinstauración del programa "Quédate en México", anteriormente conocido como Protocolos de Protección a Migrantes (MPP, por su sigla en inglés).
El republicano lanzó el programa en 2019 durante su primer mandato. Sus funcionarios dijeron que disuadiría de solicitudes de asilo fraudulentas, mientras que los defensores de derechos humanos aseguraron que ponía en peligro a los migrantes vulnerables, incluidas las familias con niños pequeños.
Biden puso fin al programa en 2021, argumentando que los migrantes eran abandonados en condiciones precarias y peligrosas en el lado mexicano de la frontera.
El canciller mexicano, Juan Ramón de la Fuente, y el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, hablaron sobre migración y seguridad.