Mujeres rurales, clave para el desarrollo agrícola del país

En el contexto de la celebración del Día Internacional de las Mujeres Rurales, el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural de México, Julio Berdegué Sacristán, reafirmó su compromiso de priorizar a las mujeres rurales en las políticas del gobierno federal

Este evento, que se conmemora cada 15 de octubre desde su establecimiento por la Asamblea General de la ONU en 2007, busca reconocer la crucial contribución de estas mujeres en el desarrollo agrícola y la seguridad alimentaria. En México, aproximadamente 67 millones de mujeres residen en el país, de las cuales 21% vive en áreas rurales. Estas mujeres son esenciales no solo en la producción y procesamiento de alimentos, sino también en la preservación de la biodiversidad. Sin embargo, enfrentan múltiples desafíos, incluyendo el acceso limitado a recursos como tierra, créditos y educación.

El secretario Berdegué subrayó que el gobierno tiene la responsabilidad de escuchar y apoyar a estas mujeres en lugar de dictarles qué hacer. Este enfoque se alinea con las palabras de la presidenta Claudia Sheinbaum, quien ha enfatizado que su llegada al poder no es solo un triunfo personal, sino un avance para todas las mujeres en México. Berdegué señaló que muchas mujeres rurales e indígenas enfrentan una "triple discriminación" ?por su género, origen étnico y color de piel?, lo que dificulta aún más su acceso al empoderamiento y posiciones de liderazgo..

Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), hay 14.1 millones de mujeres que habitan en zonas rurales, y 8.1 millones viven en condiciones de pobreza

El evento conmemorativo reunió a diversas mujeres dedicadas a la agricultura, pesca y acuicultura, así como artesanas y productoras de alimentos provenientes de estados como Michoacán, Puebla y Oaxaca. Eloísa Bautista Campos, comunera purépecha y encargada de entregar el bastón de mando a la presidenta durante la ceremonia de toma de protesta en el Zócalo, expresó su alegría por ver a una mujer asumir la presidencia del país en tan importante evento.

La presidenta de la Red Nacional de Mujeres de la Pesca, Yanett Miranda Castro Medina, destacó que las pescadoras son un sector históricamente invisibilizado pero fundamental para la sostenibilidad económica en los 17 estados costeros del país. Con aproximadamente 300 mil familias involucradas en esta actividad, Miranda subrayó la importancia del conocimiento ancestral transmitido por estas mujeres para fortalecer la industria pesquera.

Según ONU Mujeres, aunque representan alrededor del 43% de la mano de obra agrícola global, no disfrutan del mismo acceso a recursos que sus homólogos masculinos. Esto incluye limitaciones en acceso a créditos, tierras y servicios básicos como educación y salud

Este grupo desempeña un papel crucial en la producción agrícola, contribuyendo con más del 50% de los alimentos del país. Sin embargo, enfrentan una serie de desafíos significativos. Según datos recientes, seis de cada diez mujeres rurales viven en condiciones de pobreza, y su acceso a la educación es limitado, con un promedio de solo 6.6 años de escolaridad, en comparación con los 9 años a nivel nacional. Además, la cobertura de salud es alarmantemente baja; solo el 13% tiene acceso a servicios médicos adecuados, lo que se traduce en una alta incidencia de muertes maternas en estas comunidades.

A pesar de su contribución vital a la economía y la seguridad alimentaria, las mujeres rurales enfrentan desigualdades estructurales que limitan su desarrollo. Menos del 15% de las propietarias de tierras agrícolas son mujeres, lo que les impide acceder a créditos y recursos necesarios para mejorar su productividad. Las barreras culturales y económicas perpetúan su dependencia y marginación, dificultando su empoderamiento y participación en la toma de decisiones.

El gobierno mexicano ha implementado programas como Bienpesca, que beneficia a más de 44 mil mujeres pescadoras. De estas, más de 12 mil pertenecen a pueblos originarios que trabajan en zonas rurales. Los estados con mayor número de beneficiarias incluyen Sinaloa y Guerrero