Nuevo antibiótico frena gonorrea resistente por primera vez en décadas
Una nueva píldora podría cambiar la forma en que se trata la gonorrea.
Se trata de la gepotidacina, un antibiótico que ha demostrado ser eficaz y seguro en un ensayo clínico internacional con 628 pacientes, convirtiéndose en el primer tratamiento nuevo contra esta infección desde la década de los noventa.
La gonorrea es una de las infecciones de transmisión sexual más comunes y, si no se trata a tiempo, puede provocar complicaciones graves como infertilidad o embarazos ectópicos. En los últimos años, los casos resistentes a los tratamientos han ido en aumento, por lo que encontrar nuevas opciones médicas se ha vuelto una prioridad urgente.
El estudio, publicado en la revista científica The Lancet y presentado en una conferencia médica en Viena, comparó el uso de gepotidacina en píldora con el tratamiento estándar actual: una inyección de ceftriaxona combinada con una pastilla de azitromicina. Los resultados fueron positivos: la nueva píldora alcanzó un 92.6% de efectividad, frente al 91.2% del tratamiento tradicional.
Una de las ventajas más destacadas es que la gepotidacina fue eficaz incluso contra cepas de gonorrea resistentes a los antibióticos actuales. Además, no se registraron efectos secundarios graves, lo que mejora la experiencia del paciente y podría reducir la necesidad de acudir a un hospital para inyecciones.
La investigación fue realizada en 49 centros de países como Australia, Alemania, México, España, Reino Unido y Estados Unidos. Sin embargo, los científicos advirtieron que la mayoría de los participantes eran hombres blancos, por lo que se necesitan más estudios en mujeres, adolescentes y otras poblaciones.
Expertos de la Organización Mundial de la Salud y universidades europeas reconocieron el valor del hallazgo, pero también señalaron que, como con otros antibióticos, la bacteria podría desarrollar resistencia si no se usa adecuadamente.
A pesar de los retos, los científicos consideran que la gepotidacina representa una opción prometedora para tratar la gonorrea urogenital, especialmente en un momento en el que el mundo enfrenta una amenaza creciente por bacterias resistentes a los medicamentos.
