En un esfuerzo por reforzar la seguridad fronteriza, el Pentágono ha ordenado el envío de aproximadamente 1,500 soldados en servicio activo a la frontera con México
Esta acción, anunciada el viernes por un oficial estadounidense, busca proporcionar respaldo a las políticas migratorias implementadas por el presidente Donald Trump. Con este incremento, el número total de efectivos militares desplegados en la zona fronteriza ascenderá a cerca de 3,600.
La movilización comprende el envío de una brigada de logística perteneciente al Cuerpo Aerotransportado, con base en Fort Liberty, Carolina del Norte. El funcionario, quien solicitó permanecer en el anonimato debido a restricciones para discutir el tema públicamente, reveló esta información.
El Pentágono ha estado trabajando diligentemente para ejecutar las órdenes ejecutivas que Trump firmó poco después de asumir el cargo el 20 de enero. Este despliegue adicional de tropas evidencia el compromiso de la administración con el control fronterizo y la gestión migratoria
Según informes, un primer grupo compuesto por 1,600 soldados en servicio activo ya se encuentra desplegado en la frontera. Se anticipa que aproximadamente 500 soldados adicionales, provenientes de la 10ª División de Montaña, iniciarán su traslado en los próximos días.
Además, alrededor de 500 miembros del Cuerpo de Marines han sido enviados a la Bahía de Guantánamo, en Cuba, con el propósito de custodiar a algunos de los migrantes detenidos. Cientos de marines ya se encuentran en el lugar.
Se espera que las tropas destinadas a la frontera colaboren en la instalación de barreras de alambre de púas, además de proporcionar transporte, información de inteligencia y apoyo a la Patrulla Fronteriza. La brigada de logística, por su parte, se encargará de brindar soporte y mantenimiento a las tropas desplegadas.
Las tropas que se dirigen a Guantánamo tienen la tarea de acondicionar las instalaciones para la recepción de un flujo de migrantes, además de llevar a cabo otras tareas de asistencia
En relación a esto, tras un acuerdo con Donald Trump para aplazar los aranceles a México, la presidenta Claudia Sheinbaum ordenó el despliegue de 10,000 elementos del Ejército y de la Guardia Nacional para reforzar la detención del tráfico de drogas y la migración irregular.
El operativo se concentró en zonas identificadas como vulnerables, donde se registran cruces constantes de migrantes y tráfico de drogas, incluyendo Tijuana, Tecate y Mexicali, de Baja California; Agua Prieta y Sonoyta, de Sonora; Matamoros, Playa Bagdad y Ciudad Mier, de Tamaulipas; Piedras Negras y Ciudad Acuña, de Coahuila; Ojinaga, Puerto Palomas y Ciudad Juárez, de Chihuahua y Colombia, de Nuevo León.
Por otro lado, el martes, después de que Trump cesara a la comandante del servicio de Guardacostas, la almirante Linda Fagan, este cuerpo de las Fuerzas Armadas estadounidenses anunció el envío de aviones, buques y personal adicional al "golfo de América" (el nombre que la nueva Administración ha dado al golfo de México) para ejercer tareas de vigilancia.
Ese despliegue se extenderá a aguas de Florida para "prevenir y disuadir de una migración marítima masiva desde Haití y Cuba".