Mensajes por celular, invitación mediante redes sociales, folletos, o simplemente una llamada, son los medios que usan los estafadores que operan a la sombra de la banca.
Las personas desesperadas por falta de dinero son un blanco fácil para individuos o empresas dedicadas a ofrecer créditos exprés con mínimos requisitos.
Mario Di Costanzo, analista financiero dijo que "estas empresas tienen un gancho muy importante en su propaganda te dicen "te damos el préstamo en menos de 48 hs. y no consultamos buró de crédito", lo que atrae a las personas.
Otra modalidad son aplicaciones de préstamos, cuyo número está expandiéndose rápidamente? En ocasiones los usuarios incumplidos son amenazados de muerte.
El momento más delicado, llega cuando piden datos personales...
Jesús Chávez, Director de análisis y estadística de productos financieros de la Conducef, mencionó que: "entran al paso siguiente que es, bueno, dame tus datos y entonces empiezas a poner en la aplicación tus datos, tu dirección, tu teléfono, y luego muchas veces te dicen bueno, está autorizado, dónde te depositamos el crédito y entonces lo que te piden si es una fotografía por anverso y reverso para que te puedan hacer ese depósito, con eso ya te robaron tus datos financieros.
Para enganchar clientes hay quienes se hacen pasar por instituciones reguladas.
De 2019 a la fecha son aproximadamente 423 empresas suplantadas. Existe también el llamado "gota a gota" surgido en Colombia. Sus mecanismos de cobro son propios del crimen organizado.
¿Cómo reconocer a los defraudadores?
Mario Di Costanzo dice que "nunca te hacen explícita la tasa de interés, te dicen que te prestan sin consultar el buró de crédito, que el préstamo será en 48 horas y lo único que te piden es una identificación y un comprobante de domicilio".
Cuando piden comisión o adelanto hay que encender las alertas.
"Ninguna institución financiera seria, bien establecida, te pide dinero por adelantado para darte un préstamo, ninguna", explica Di Constanzo.
Las recomendaciones son: revisar muy bien lo que se está firmando, no firmar hojas en blanco.
Con información de Gastón García Miranda