Decenas de familias de personas desaparecidas en México protestaron este martes en Acapulco, Guerrero, mientras la presidenta Claudia Sheinbaum encabezaba una sesión del Consejo Nacional de Seguridad en el Fórum Mundo Imperial, donde se reunieron los gobernadores de todo el país.
Cerca de 80 manifestantes, entre los que se encontraban familiares de desaparecidos y damnificados por el huracán John, alzaron la voz para exigir respuestas y apoyo a las autoridades.
Con fotografías de sus seres queridos desaparecidos y carteles que exigían justicia, los manifestantes se ubicaron cerca del lugar donde se celebraba la reunión. A través de estas acciones, buscaron visibilizar la grave crisis que atraviesan miles de familias mexicanas que, como ellos, no han podido encontrar a sus familiares. Según la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB), casi 120,000 personas están desaparecidas en México desde que comenzó el registro.
Socorro Gil, madre de Jonathan, quien desapareció hace seis años, fue una de las voces más visibles en la protesta. Expresó su frustración con la falta de atención y respuestas por parte de las autoridades. "Llevamos más de dos años visibilizando a nuestros desaparecidos y hasta ahorita nadie se ha acercado a ver qué se nos ofrece", declaró. A pesar de las constantes manifestaciones en Acapulco y Chilpancingo, Guerrero, las familias no habían logrado que se les ofreciera una solución concreta hasta esa fecha.
Las familias de los desaparecidos han manifestado en diversas ocasiones su decepción con el gobierno del expresidente Andrés Manuel López Obrador, quien no se reunió con las madres buscadoras durante su sexenio, en el que se registraron unas 50,000 desapariciones. En este contexto, las familias han exigido que la Fiscalía General de la República (FGR) se involucre activamente en las búsquedas.
Gil también señaló las dificultades económicas que enfrentan las familias para continuar con la búsqueda de sus seres queridos, ya que muchas veces tienen que costear todo por su cuenta, sin el apoyo de las autoridades. "Tenemos que quedarnos a dormir en el piso porque no tenemos para pagar un hotel", denunció.
A la par de la protesta de las familias de desaparecidos, hubo otras dos manifestaciones de damnificados por el huracán John, que causó al menos 30 muertes en Guerrero. Estos grupos exigían apoyos económicos para reparar sus viviendas y ser incluidos en los censos del gobierno federal, sin obtener respuestas satisfactorias hasta ese momento.
Mientras la presidenta Sheinbaum presidía la sesión del Consejo Nacional de Seguridad, que tenía como temas principales la violencia y el plan migratorio ante la reelección de Donald Trump, los manifestantes continuaron su lucha por visibilizar los temas que afectan a las familias mexicanas, como la desaparición forzada y los desastres naturales.
En medio de las discusiones sobre seguridad, estas protestas resaltan la necesidad de que el gobierno federal brinde respuestas claras y efectivas a las víctimas de la violencia y los desastres.
Con información de EFE.