Se está implementando un innovador proyecto que aprovecha las nuevas tecnologías para permitir que las personas puedan explorar la Zona Arqueológica La Venta, en Tabasco, desde la comodidad de sus hogares
Juan Francisco Correa Posada, un estudiante de maestría en arqueología del Centro de Estudios Arqueológicos de El Colegio de Michoacán, se encuentra en el proceso de reconstruir el Complejo A de la Zona Arqueológica La Venta (ZALV), en Tabasco. Este proyecto tiene como objetivo ofrecer una experiencia inmersiva a estudiantes y profesionales interesados en la cultura olmeca, considerada la más antigua de Mesoamérica.
La reconstrucción del Complejo A se fundamenta en la interpretación de la evidencia arqueológica disponible, un aspecto que Correa Posada destacó durante su participación en el seminario "Compartiendo experiencias de divulgación del patrimonio cultural mediante tecnologías de representación visual digital", organizado por la Secretaría de Cultura federal y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). Este seminario se llevó a cabo virtualmente el 21 de octubre de 2024, a través de INAH TV.
En su conferencia titulada "Reimaginando el complejo A. Explorando el centro ceremonial de 'La Venta' olmeca desde la mirada virtual", Correa Posada enfatizó que su investigación busca integrar herramientas digitales para estudiar la experiencia de los antiguos habitantes del sitio durante el periodo Formativo Tardío (800-400 a.C.).
Según él, la visita virtual podrá generar experiencias similares a las que vivieron los habitantes en el pasado, lo que permitirá construir nuevas interpretaciones sobre su cultura
El Complejo A se sitúa en la parte norte de la ZALV e incluye elementos significativos como estatuas, mosaicos masivos, tumbas y ofrendas. Correa Posada explicó que su enfoque se limitará a esta sección específica del sitio, donde los objetos serán presentados en su contexto original y en el orden en que se encontrarían al recorrer el lugar. La ZALV ofrece un recorrido procesional aproximado de 2 kilómetros, con una narrativa mito-histórica que ilustra eventos y personajes clave en la historia olmeca, lo que hace inviable abarcar toda el área en esta reconstrucción.
El proyecto está diseñado principalmente para estudiantes y arqueólogos, con la finalidad de que puedan generar nuevas lecturas sobre la cultura olmeca y sus vestigios. Para llevar a cabo esta iniciativa, Correa Posada desarrolló dos modelos: uno arqueológico, que recopila y organiza información sobre los artefactos del Complejo A; y otro teórico, que aborda las actividades y usos de los espacios físicos y la cultura material encontrada. La combinación de estos modelos es esencial para la creación de una reconstrucción tridimensional que actualmente se encuentra en desarrollo.
Aunque el trabajo aún está en progreso, Correa Posada afirmó que los modelos tridimensionales son herramientas valiosas para sintetizar el conocimiento arqueológico y facilitar su transmisión
Entre las herramientas utilizadas en esta investigación se encuentran el escaneo 3D, ideal para registrar la geometría de objetos como estelas y bajorrelieves; la fotogrametría, que utiliza conjuntos fotográficos para crear imágenes detalladas; y la fotografía 360, que permite explorar paisajes y estructuras arqueológicas con alta resolución. También se emplea la reconstrucción visual para recrear artefactos y contextos arqueológicos mediante un proceso interpretativo.
La arqueología virtual no solo se limita a la reconstrucción histórica; también incluye aplicaciones como el desarrollo de videojuegos, visitas virtuales inmersivas mediante realidad virtual e impresión 3D para reproducir objetos