La Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) determinó el día de hoy que la prohibición de importar cigarros electrónicos y productos relacionados es inconstitucional. Este fallo se basa en el decreto de la Ley de los Impuestos Generales de Importación y Exportación, promulgado el 7 de junio de 2022, y fue aprobado por mayoría tras el análisis del proyecto presentado por el ministro Jorge Pardo Rebolledo.
La decisión beneficia a la tabacalera Philip Morris México, al considerar que la norma impone restricciones excesivas a la libertad comercial
La Corte estableció que, aunque se permite a Philip Morris importar dispositivos de vapeo, no se está autorizando el consumo indiscriminado de soluciones o sustancias asociadas con estos productos. El fallo no implica una apertura total al uso de cigarrillos electrónicos, ya que se limita a la empresa mencionada y no afecta a otros productos similares que podrían surgir en el mercado.
Es relevante mencionar que esta prohibición había sido implementada durante la administración del expresidente Andrés Manuel López Obrador, con un enfoque en la salud pública. El proyecto aprobado por la SCJN aclara que su resolución no implica un apoyo generalizado al uso de cualquier tipo de sustancia utilizada en estos dispositivos, incluyendo aquellos que utilizan tabaco calentado o sistemas alternativos de consumo de nicotina.
El amparo otorgado a Philip Morris México protege a la empresa contra futuras restricciones y establece un precedente legal que podría influir en futuros litigios. La sentencia especifica que esta protección se mantendrá hasta que se modifique la Ley de los Impuestos Generales de Importación y Exportación, lo cual es un aspecto crucial para la industria del tabaco y sus derivados.
Según el gobierno de México, se estima que 938,000 adolescentes han probado estos dispositivos, y aproximadamente 160,000 los utilizan regularmente
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha advertido sobre los riesgos asociados con los cigarrillos electrónicos y vapeadores, señalando que pueden contener sustancias tóxicas y carcinógenos. Estos dispositivos no solo representan un riesgo para los usuarios, sino también para aquellos expuestos al aerosol exhalado. El uso de vapeadores se ha relacionado con un aumento en la adicción a la nicotina, especialmente entre los jóvenes, quienes son atraídos por sabores agradables y la facilidad de acceso a estos productos.
A pesar de las prohibiciones, el número de usuarios de vapeadores ha aumentado notablemente. En 2023, se reportó que había 2.1 millones de usuarios, lo que representa un incremento significativo desde los 975,000 registrados en 2019.
En octubre de 2022, la Suprema Corte de Justicia dictaminó que algunas prohibiciones eran inconstitucionales, lo que permitió a ciertos grupos solicitar amparos para continuar con la importación y venta de estos productos