Una copa de vez en cuando no es malo y algunas bebidas como la cerveza o el vino tomadas con moderación resultan benéficas para la salud.
Sin embargo, como en todo, el exceso es malo, y en este caso puede provocar una adicción difícil de superar: el alcoholismo.
Esta dependencia perjudica en gravemente la salud y aumenta el riesgo de muerte como consecuencia de enfermedades en el hígado, cáncer, depresión y accidentes.
Hay diversas maneras de combatir este mal, desde grupos de ayuda hasta sprays nasales.
¡Sí!, sprays nasales, un equipo de científicos chilenos desarrolló un aerosol de aplicación nasal que tiene como objetivo inhibir las recaídas que suelen sufrir quienes tratan de dejar el alcohol.
Según la información revelada, el producto está hecho de células madre -obtenidas de liposucciones- que tienen propiedades antiinflamatorias y antioxidantes que causan reacciones en el cerebro de un individuo alcohólico que normalmente presenta neuroinflamación y neurodegeneración debido a su adicción.
Otro beneficio es que permiten que sea más rápida y efectiva la generación y recuperación de neuronas, astrocitas y glías, conmunmente dañadas por este padecimiento.
El trabajo dirigido por Yedy Israel, fue puesto a prueba en ratas a las que se les ofreció libremente alcohol.
Tras tres meses de adicción, algunos animales fueron inyectados con células madre mesenquimales en el líquido cefalorraquídeo, mientras al otro le introdujeron una solución salina que funciona como placebo. Luego, fueron sometidos a una abstinencia de 15 días.
Al regresar, se les volvió a ofrecer alcohol y los resultados fueron sorprendentes: Las ratas que recibieron el placebo aumentaron su consumo a media botella de whisky en 60 minutos, mientras que las otras consumieron sólo 28 gramos de alcohol, casi un 80 por ciento menos, equivalente a un bebedor social.
Actualmente, científicos de Alemania y Estados Unidos ya están solicitando compuestos para probar su efectividad en modelos de adicción a la cocaína y otras sustancias como el tabaco.