"En el negocio tenemos como 42 años, mi mamá empezó cuando yo estaba pequeña y duró 12 años, yo soy la segunda generación y llevo 31 años y la tercera generación que es la de mis hijos que ya empiezan también".
La mejor herencia que les han dejado es el trabajo.
"Enseñarles lo principal de dónde vienen porque de aquí mis hijos ya tienen sus carreras cada uno pero aquí siguen trabajando, de lunes a viernes son licenciados y sábado y domingo son tianguistas//me ha tocado apoyarlos y sacarlos adelante sola pero siempre con mi mamá ayudándome".
Generar empleos es su mayor satisfacción.
"La convivencia diaria con las personas, el convivir, el trato con la gente es lo más bonito//trabajamos en familia casi la mayoría del negocio es familia, estas muchachas son vecinas pero viven a dos tres casas entonces es familiar ya todo y con como 15 empleados".