Cecilia Anguiano administra el negocio de dulces y especias que comenzó su papá hace 33 años. Señala que a lo largo de los años han tenido que ir innovando para permanecer en el gusto del cliente.
"Mi papá fue el que empezó y mi mamá le ayudó y desde entonces ha seguido solamente ha cambiado el propietario y ahorita está a mi nombre el negocio/mi abuelito siempre fue comerciante y por Madero comenzaron en La Hormiguita y ahorita tiene otro más chiquito".
"Siempre venía de chica y les fui ayudando poco a poco/hay personas que me dicen te conocí de chiquita y desde que empezaron tus papás y pues como quien dice le van diciendo a la gente y esa gente viene a comprar".
Aunque como en muchos negocios, en este también han resentido la situación económica que vive el país. Sin embargo, día a día se despiertan con entusiasmo y el ánimo para no dejar caer el negocio y así seguir ofreciendo el mejor servicio al cliente.
"Es complicado las ventas han bajado mucho no sé si es de la economía del país o en Colima o nosotros porque sufrimos la economía pero ahí vamos poco a poco tratando de mantenernos, qué es lo que más te gusta, atender a los clientes de buena gana porque si no los atiendes bien ya no vienen/tratamos de que los precios no sean elevados porque hay mucha competencia por estos lados y tratamos de no elevarlos para que no se nos vayan para otros lados".