Latas de aluminio, fierro viejo y plástico, son los materiales que más se reciben en los giros comerciales conocidos como chatarreras y operan en la zona conurbada de Colima y Villa de Álvarez. Se reconoce que este tipo de negocios se han estigmatizado, sin embargo también se insiste que no se compran objetos robados.
"Nosotros ya sabemos qué, que la ley nos prohíbe comprarla, como son este cables de Comisión, los medidores de agua de la, los que son de bronce de la Ciapacov, también, cable de cobre del teléfono, las alcantarilla de fierro", expresó Pedro Alberto Silva Rodríguez.
Afirma que este tipo de negocios son muy útiles y evitan que muchos de estos desechos se vayan a la basura a contaminar. Destaca que después de reunirlos se envían a Guadalajara a otras recicladoras donde recibirán otro proceso y serán transformados en productos de utilidad.
"Hay lugares en Guadalajara especializados para el plástico, para el papel y para la chatarra, el aluminio. Aquí lo que más cae pues en sí la chatarra, como pueden ver, chatarra y bote de aluminio es lo que más cae aquí"
Como recicladora, Pedro destaca que en ocasiones también acuden personas y encuentran objetos que pueden reutilizarse.