La necesidad de las personas de encontrar el amor, atraer el dinero y la abundancia, ha permitido que el negocio de Andrés Solís Cámara permanezca vigente a lo largo de 30 años.
Comenzó vendiendo velas, cuarzos, incienso, amuletos y otros productos en el tianguis, sin embargo, con la demanda, pudo instalarse de manera formal.
"El amor es lo más solicitado y después el dinero/hay lociones, incienso, perfumes, están de moda ya ves los perfumes con feromonas".
Reconoce que a pesar de la apertura que hay para las nuevas tecnologías y redes sociales, la gente sigue buscando los productos relacionados con el esoterismo, incluso, hay quienes acuden con la intención de que se les realice alguna limpia o amarres, aunque estos trabajos dibujo, se realizan solo para clientes especiales.
La temporada en donde la gente realiza más rituales es al cierre de cada año, aunque también los realizan cuando hay luna llena o luna nueva, aseguró el propietario del negocio.
"Para cuestiones legales, de juicios, para esas cosas/por ejemplo el viernes es el día del amor y la gente trabaja más/amarres, desalojos, sobre todo esta zona que estoy del centro hay muchos espíritus, no malignos pero que dan mucha lata".
Para Andrés este trabajo es muy bonito porque puede orientar a la gente y ayudarles a resolver algunos problemas, aunque también reconoció que este trabajo suele ser complejo debido a los trabajos que algunas personas llegan a solicitar.
"la gente se apasiona con algunas cuestiones verdad y deben ser más tranquilos por las situaciones".