En la zona metropolitana de Colima y Villa de Álvarez el comercio informal va en aumento, a pesar de los intentos de las autoridades por combatirlo, explicó el secretario de la Asociación de Comerciantes del Centro Histórico de la capital colimense, Mario Toscano.
"Mucha gente o comerciantes informales o ambulantes que es lo que llega vienen por temporadas o se les ve con un comercio que no veíamos aquí hace 10 años y hay compañeros que venden ciertos artículos o productos son los que se han visto más afectados en el asunto de la paleterías, en el asunto de lo que es más que nada la comida o la restauranteria"
Precisó que el comercio formal contribuye a mantener vivo el centro, paga impuestos, renta, luz y personal, pero con solo caminar por las calles te encuentras personas que sin pagar un solo impuesto ofrecen aguas frescas, postres, alhajas, perfumes, productos de importación, huaraches y artículos de temporada, entre otras cosas, sus ganancias les quedan libres y los inspectores del ayuntamiento no pueden con ellos aunque intentan controlarlos.
"Es una lucha constante entre los comerciantes ambulantes y los inspectores hemos visto que ahora hacen equipo para estarse cuidando o vigilando unos de otros osea ven al inspector en la esquina de la parte contraria y unos se avisan con los otros para que salgan de la zona centro, luego se retira el inspector y regresan a vender de nuevo".
Sin embargo dijo en donde el comercio está fuera de control es en Villa de Álvarez y se puede observar en las avenidas Benito Juárez y Pablo Silva.
