Las clases presenciales no van, sostuvo la sección 7 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), después de que el Gobierno de Chiapas, aseguró que los alumnos de al menos 10 mil de las más de 19 mil escuelas públicas de los niveles básico y medio superior de la entidad retornarán a las aulas el próximo 30 de agosto.
Por su parte, Armando Falconi Borraz, secretario general de la Asamblea Estatal Democrática, de la Sección 40 de la CNTE, expuso que a unos días del inicio del ciclo escolar 2021-2022, el próximo 30 de agosto, serán los padres de familia quienes determinan si hay regreso a clases presenciales.
"Nunca hemos estado en contra de iniciar de manera presencial decimos que es algo esencial para el magisterio por los vínculos que se tiene con los padres de familia y con alumnos, sin embargo, en las condiciones que tiene el país, donde se han lavado las manos en no dar recursos emergentes".
El líder magisterial abundó que, con los repuntes de casos de la cepa delta en menores de edad, la exigencia del magisterio es que se otorguen recursos emergentes a las escuelas para hacer frente a la pandemia, por parte de los tres niveles de gobierno.
En Chiapas, ante el rezago educativo que existe, mínimamente debe haber un recurso emergente de cinco mil millones de pesos para poder establecer condiciones de infraestructura educativa, agua potable, baños dignos, en las escuelas donde se utilizan letrinas en zonas marginadas. Por ello la exigencia de que el gobierno federal asuma su responsabilidad y no sean maestros y padres de familia los que asuman los riesgos.
Desmintió la entrega de kits de limpieza que supuestamente entrega la Secretaría de Educación en Chiapas.