En el Congreso de Colima se analiza una iniciativa para prohibir la venta, a menores de edad, de bebidas o alimentos de alto contenido calórico, azúcares, sodio o grasas. Esto, con el objetivo de atender las afectaciones a la salud derivados de los altos índices de sobrepeso y la obesidad.
Al respecto, Guillermo Toscano, presidente de la Comisión de Salud, señala que antes de aprobar esta modificación, se debe consultar a las empresas que resultarían afectadas.
"Tendremos que realizar mesas de diálogo con el sector empresarial, con las cámaras empresariales para ver hasta dónde podemos avanzar en esta iniciativa".
"Y al afectar a una empresa, su fortaleza económica, sabemos que primero se van a la nómina, al sector laboral, qué tenemos que hacer, dialogar con estas empresas para que puedan fortalecer y sobre todo cooperar en una estrategia de mejoramiento de salud de nuestros niños"
Oaxaca fue el primer estado del país que aprobó la prohibición de comida chatarra a menores de edad, en Ciudad de México y Colima hay iniciativas que buscan seguir sus pasos.
La modificación en la entidad colimense, presentada por los legisladores Vladimir Parra y Blanca Livier Rodríguez, se pretende lograr a través de una adición a la Ley de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes. Implica también la prohibición de la publicidad de comida chatarra en centros educativos.
El presidente de la Comisión de Justicia Gobernación y Poderes, Carlos Farías, coincide con que este cambio legislativo, impactaría en las empresas.
"Me parece que si centramos bien nuestras baterías, y objetivos en torno a la responsabilidad de ser padre, nos parece que inclusive le damos más viabilidad a ese tipo de legislación y la hacemos más social y amigable y no la hacemos de una manera confrontando algún tipo de comercio, industria o empleo".
A decir de los legisladores, se debe abogar más por la prevención que por la prohibición.
"Para mí la iniciativa de decir prohibir a menores de 18 años, estámonos yendo muy muy arriba, tenemos que ver hasta dónde para poder involucrar a los padres de familia o a la sociedad para que pueda generar conciencia en nuestros niños y adolescentes del daño que generan los productos chatarra", añadió Toscano Reyes.
La iniciativa se encuentra ahora en análisis en la Comisión de Salud, y no hay una fecha establecida ni para iniciar las mesas de diálogo ni para llevarla a votación.