A casi un mes del desbordamiento del río Colima sobre la calle Doctor Miguel Galindo, en el centro de la capital, a causa de las lluvias que dejó el huracán Lidia por la entidad, personas que resultaron afectadas confirman que no han recibido ningún apoyo de las autoridades estatales o federales, incluso hay damnificados que quedaron fuera del censo que realizó la Delegación del Bienestar.
"No ha llegado ningún apoyo del gobierno, nada, no ha llegado para nada, ni la gobernadora ha venido para nada. Mi ropa, mi estufa, lavadora, todo perdí, me quedé sin nada, nomás con lo que traía puesto, necesito más apoyo, verdad, y el gobierno quedó en darnos enseres para tener algo para comer porque no tenía ni para comer", expresó Noé Rozano Guzmán.
Son varias viviendas las que todavía tienen huellas de la inundación, sin embargo no todas fueron censadas, como es el caso de la señora Briseida Alcaraz Iñiguez a quien dejaron fuera del programa a pesar de perder un automóvil, muebles y diversos electrodomésticos por la inundación.
"Yo no quedé dentro de los censos de apoyo para los damnificados, sin embargo me acerqué a las personas que estaban encargada de ello en su momento y no tuve respuesta para que se me tomara en cuenta, no lo creo justo que haya quedado fuera del programa, no lo veo justo porque sí tuve pérdidas", mencionó Briseida Alcaraz Iñiguez.
Cabe destacar que el Gobierno estatal sólo reconoce las siguientes afectaciones tras el paso del huracán Lidia: 5 personas con daños significativos en viviendas, 350 personas con daños moderados en viviendas, 30 comerciantes con afectaciones en negocios de Los Amiales, Coquimatlán y Pascuales, en Tecomán; 2 mil hectáreas agrícolas dañadas, 17 puentes afectados, 20 tramos carreteros con daños y 22 puntos con socavones.