Durante los últimos cuatro años, la extorsión ha crecido por cinco en el estado de Colima. El Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública detalla cómo ha incrementado este delito.
De enero a agosto de 2017, se registraron 15 casos; en el mismo periodo de 2018, 34; en 2019 fueron 54, y para agosto del 2020, hubo 78 hechos denunciados.
Autoridades federales han referenciado que entre el 50 y 80 por ciento de las llamadas de extorsión, salen de los penales.
Sergio Granados, director de Seguridad Pública en Villa de Álvarez, explica cómo es que se llega a caer en este delito.
"El error que regularmente cometemos es proporcionar nombres, de ahí se agarra la gente, soy tu tío Sergio y me tienen secuestrado y empiezan a llorar y hacer el teatro y viene la extorsión, si no me depositas tanto dinero me van a matar me están torturando y empiezan incluso a gemir, a hacer sonidos de que los están golpeando".
La Policía Federal recomienda las siguientes medidas para evitar ser víctima de extorsión telefónica:
No facilitar información personal o de tu familia a personas desconocidas.
Mantener comunicación constante con tu familia, informarles dónde estás, con quién y a qué hora tienes previsto regresar a casa.
Si al contestar una llamada te preguntan ¿con quién hablo?, responde ¿con quién quiere hablar? Si no obtienes respuesta, cuelga.
Evita ingresar datos personales en computadoras de uso compartido.
No exhibas datos, fotos ni videos personales en perfiles abiertos de redes sociales. Configura la privacidad de la cuenta de acuerdo a tu conveniencia.
En caso de recibir una llamada de extorsión, se recomienda mantener la calma, no ceder a la exigencia económica, colgar y verificar si la situación planteada, es real.
"La denuncia es muy importante para acabar con ese tipo de extorsiones, sobre todo porque vienen las llamadas de los CERESOS y de CERESOS de otros lados, por ejemplo, de Nuevo León, Tamaulipas, Veracruz, se ha detectado mucho llamadas de ese tipo", añadió.