En la última década en el estado de Colima ha disminuido el número de personas que profesan la religión Católica y ha aumentado el número de habitantes que aseguran no tener religión.
"Ahora tenemos mayor movilidad de ideas, digamos de análisis de ideas lo que las propuestas religiosas viajan rápidamente a través de internet y muchos medios / algunas personas dicen es que son fraudulentos, la verdad es que yo no los conozco en esos términos, yo los conozco como gente que predica algo".
El último Censo del INEGI, publicado en 2020, revela que, en 2010, el 87.9 por ciento de los colimenses eran católicos, lo que se traduce en 642 mil 892 creyentes, sin embargo, para 2020, la cifra se redujo a un 83.5 por ciento, dando un total de 610 mil 711 creyentes.
Contrario a ello, el número de Protestantes o Cristianos Evangélicos incrementó, al pasar de 38 mil 32 en 2010, es decir el 5.2 de la población a 57 mil 779, lo que significa el 7.9 por ciento de colimenses.
La cifra de otras religiones también se redujo, de 1.8 a 0.1 por ciento, es decir, de 13 mil 165 personas que practican otra religión, para 2020 se redujo a 731.
Entre tanto, el número de personas que dicen no tener religión pasó de 23 mil 404 en 2010 a 53 mil 391 en 2020.
"No es que sean malas las religiones, son alternativas que la gente busca y encuentra para hacer algo y, qué resultados les da, solo la gente lo sabe, no somos quien para impedirles, no somos quien para criticarlos".