Desde muy chico Gabriel Gallegos Macías trabajó con su padre aprendiendo a trabajar el campo, y a pesar de la partida de su padre, Gabriel continuó produciendo en sus huertas de limón. Tras 30 años de estar cuidando su parcela, ha visto pasar huracanes y ciclones, pero no ha desistido de continuar.
"Es ahora sí como dicen, el oro verde, porque todo el tiempo, si tú mantienes tu huerta sana, en buen estado, todo el tiempo estás cosechando, todo el tiempo traes tu dinerito en la bolsa, poquito, a veces más dependiendo el precio, pero todo el tiempo estás sacando dinero"
Los beneficios que le trajo el agua de los últimos fenómenos meteorológicos como Lorena y Narda, también traen consecuencias negativas, pues la fuerte producción y la entrada del fruto importado han hecho que baje el precio del limón, lo que no genera buenas utilidades.
"Ahorita anda alrededor de cinco o cinco cincuenta, cuando debería de andar en ocho, o diez pesos
Afirma que para él el limón es de los mejores cultivos, aunque las enfermedades en los frutos no se detienen y proliferan en estás épocas, Gabriel seguirá trabajando el legado de su padre para preservarlo.