El ataque al corazón, ataque cardiaco, paro cardiaco o infarto, se manifiesta cuando se obstruye el flujo de sangre al corazón y si no se restablece rápidamente, el músculo cardíaco comienza a morir o necrosarse, es decir, se degenera el tejido por la muerte de sus células, esto de acuerdo con la Secretaría de Salud a nivel federal.
En el 2020, las cifras en Colima fueron de 819 casos de infartos agudos de miocardio, la segunda causa de mortalidad general en la entidad, así se señala en las estadísticas de la Secretaría de Salud Estatal.
En su mayoría, los ataques cardíacos se presentan como resultado de grasa acumulada en las arterias, lo que impide que la sangre llegue al corazón y deje de bombear al resto del cuerpo.
Es importante señalar algunas medidas preventivas para evitar un infarto, que pueden ser incrementar el consumo de pescado, aumentar el consumo de frutas y verduras, reducir el consumo de alimentos ricos en grasas de origen animal.
Así como evitar fumar y realizar ejercicio de manera constante.