Además de la desinformación que sobresalió en la jornada de vacunación de este lunes en el Polideportivo de la Universidad de Colima, también destacó la falta de apoyo a los adultos mayores que presentaban problemas para desplazarse y llegar al punto de ingreso al módulo de vacunación, pues ni siquiera había sillas de ruedas que facilitara su traslado.
Entre una fila de más de 300 personas y bajo un intenso sol, el señor José Gutiérrez, quien tiene problemas en su vista y piernas, avanzó con mucho trabajo hacia el Polideportivo.
José Gutiérrez: "Me trajo en un carro mi hijo, me arrimó aquí. ¿Dónde vive usted? Aquí en la colonia Revolución, pero caminar desde allá, pues no, cuándo". ¿Ya caminamos un buen tramo, verdad? Sí ahorita sí.
Al compartir con Meganoticias unas palabras, dijo sentirse a gusto por recibir la vacuna, pues con ello estará más protegido ante la Covid-19.
José Gutiérrez: "Es que también un, murió un tío mío de Covid, de allá de Guadalajara, pero me dijeron todo lo que había pasado.
Otro caso es el de la señora Humberta López Ramírez de 88 años, quien llegó sola a bordo de un taxi desde la colonia Gustavo Vázquez Montes y, al igual que el señor José, tuvo que ser auxiliada por una voluntaria por sus problemas para caminar con su andadera.
Humberta López Ramírez: "Yo vengo sola y vine caminando desde allá hasta acá, porque el carro me dejó hasta allá, pero aquí estoy joven todavía / Una señorita me trajo desde la esquina hasta acá caminando, en el carrito hasta acá y me sentó, que Dios la bendiga".
Pese a recibir la vacuna, la señora Humberta afirmó sentir miedo a la enfermedad.
Humberta López Ramírez: "Pues, yo siento miedo, pues a lo mejor sí nos va a dar la enfermedad, ese es el miedo que tengo que a lo mejor sí me va, no me ha dado pues estoy encerrada".
Cabe señalar que al contar con espacio suficiente en el interior del Polideportivo, muchos adultos mayores con discapacidad y problemas para caminar podían entrar a bordo de un automóvil para facilitar su acceso a la vacuna; sin embargo aquellos sin vehículo, sí tenían que caminar más de 200 metros para llegar al módulo, sin importar su edad o condición de salud.