Tras la reapertura de las guarderías o estancias infantiles en la entidad, Margarita, quien labora en uno de estos centros de cuidado de niñas y niños en etapa lactante, maternal e inducción a preescolar, asegura que, en el marco de la pandemia por el Covid-19, se han reforzado las medidas sanitarias en forma estricta para garantizar la salud de los menores y del personal, así como de los mismos padres de familia.
"Se tienen dos entradas, una para los infantes menores de un año de edad y de un año y medio aproximado es otra entrada, ya que son niños que ya entran por sí solos o acompañados solamente de una persona, ya sea mamá o papá, de igual forma están estipuladas unas marcas en el piso como para tener lo, lo que es la distancia".
Afirmó que el uso de cubrebocas es obligatorio para alumnos y papás, así como la toma de temperatura al ingreso, la aplicación del gel antibacterial y la desinfección del calzado. Resaltó que en el interior del plantel se promueve el lavado de manos en forma constante y se busca que el contacto con alumnos de otros grupos sea mínimo.
"En el salón de clases nada más se sientan dos alumnos por mesa, también teniendo un poco más de distancia y, pues, al igual que las maestras todo el tiempo con su cubrebocas y si hay, este, algún impedimento por salir al lavado de manos, pues el uso de gel antibacterial".
Finalmente destacó que estas medidas de seguridad sanitaria han generado confianza entre los padres de familia, ya que a partir del mes de febrero aumentó la asistencia de niñas y niños a estos centros.