La falta de atención en el Centro Estatal de Hemodiálisis en Colima ha sido una constante desde hace varios meses, situación que se agravó ante la falta de insumos y medicamentos en el sector salud recientemente.
En noviembre del 2023, esta situación ocasionó la muerte de una menor con enfermedad crónica renal, pues a pesar de que sus familiares habían solicitado atención médica, no recibió el tratamiento adecuado.
"Todo aquel que tiene un padecimiento lo que menos quiere encontrar es que cuando acude a la institución la que le tiene que dar un medicamento para su tratamiento y así evitar tener un problema de salud es que no haya la atención o que incluso habiéndola no haya los medicamentos".
Las autoridades responsables del área han reconocido que no se les puede brindar atención a todos los pacientes que lo requieran por que no cuentan con la capacidad para hacerlo.
Por tanto, sólo reciben personas que ya fueron atendidas en el hospital y acuden para continuar con una terapia crónica programada.
"No estamos abiertos a la población en general porque el centro no tiene capacidad en consultorios ni médicos para poder hacer un trabajo de detección ".
Actualmente son atendidas 130 personas en el Centro Estatal de Hemodiálisis, de las cuales, 99 reciben hemodiálisis programada.
Mientras que en personal, se cuenta con 13 nefrólogos, tres de ellos son de nacionalidad cubana. En equipamiento reconocen que existe rezago, ya que desde el 2012 que inició a funcionar el centro cuentan con 14 riñones artificiales y aunque no descartan la posibilidad de abrir más espacios de atención los sábados en el turno vespertino y nocturno, es un discurso que lleva ya varios meses.