La falta de inclusión para las personas con discapacidad en el transporte público de Colima, genera que taxistas eleven los costos en el servicio afectando la economía de quienes padecen una discapacidad. La deficiencia en la administración y manejo de las unidades especiales de proyectos de movilidad anteriores han concluido en el fracaso.
David Monroy Rodríguez director del INCODIS
"El transporte es una herramienta indispensable para la movilidad, para ir a las terapias, atención a la salud, a trabajar o a recrearse, es una herramienta indispensable, de las 17 unidades que había solo quedan dos, esto ha propiciado los precios hasta de abuso por parte de quienes las operan, hay persona que tiene que pagar 300 pesos por un viaje sencillo dentro de la ciudad, que en un taxi común se pagan 50 pesos, para que se den una idea de la magnitud del costo tan desproporcionado que tiene que pagar actualmente una persona con discapacidad".
DEFICIENCIAS EN LOS PROYECTOS DE MOVILIDAD
"En 2012, 2013 con recursos de un fondo federal que era Fondo Para Accesibilidad en el Transporte Público a Colima se le entregaron recursos y se compraron algunos unidades que se pusieron a operar en la modalidad de taxi, sin embargo ese proyecto fue implementado de manera deficiente porque se utilizó la marca de unos vehículos que no es apropiado para el uso rudo, quienes operaron los vehículos no tuvieron la capacitación en cuanto a administración y manejo de una unidad de transporte público y pues no hubo el cuidado adecuado a la vuelta de varios años la mayoría de esas unidades terminaron desvieladas".