Braulio es una persona sorda y es uno de los meseros más activos en su centro de trabajo. Con el apoyo de un intérprete de la Lengua de Señas Mexicanas, reconoce que ha sido difícil ser incluido en el sector laboral, pero en su caso ha encontrado apoyo y métodos para tener comunicación con los clientes.
"Él está interpretando el trabajo cómo es aquí, que a él le gusta servir"/ "le gusta traer las cosas, le gusta atender a la gente, le agrada mucho su trabajo", señaló Omar Rodríguez, quien interpretó las señas de Braulio.
A sus 32 años, considera que hace falta fomentar más entre la sociedad la Lengua de Señas Mexicanas para poder comunicarse con personas de este sector.
"Más o menos, más o menos difícil, pero aquí tiene apoyos, tiene apoyos visuales. Este es un apoyo visual para que puedan interpretar algunas señas de cómo familiarizarse con él".
En el interior del restaurante ubicado en el jardín principal de Villa de Álvarez, Braulio va de un lugar a otro, lleva la cuenta a las mesas, recoge la loza, y en algunos casos hasta festeja los cumpleaños con la clientela, es claro que su discapacidad auditiva no ha sido impedimento para salir adelante.
"Para ti es difícil aquí o más menos??más o menos??sí, sí, todo le gusta, que es un nivel un poquito mejor y que, este, ¿propinas? Muy buenas", señaló Braulio a través del intérprete.