El fumador pasivo es aquella persona que, pese a no ser fumadora, aspira este humo. De hecho, el humo que inhala el fumador pasivo es el de la corriente secundaria, que contiene hasta tres veces más nicotina y alquitrán que la corriente principal que aspira el fumador y unas cinco veces más de monóxido de carbono.
Un fumador pasivo tiene un 20 a 30 por ciento más de riesgo de padecer una enfermedad coronaria y cáncer de pulmón. Los hijos de padres fumadores tienen un 20 por ciento más de riesgo de padecer asma, un 30 por ciento más de riesgo en infecciones respiratorias, un 30 por ciento más a padecer otitis y un 50 por ciento más de riesgo de catarros frecuentes, tos persistente, etc.
"El tabaco está hecho por más de 7 mil químicos que el principal viene siendo la nicotina, la nicotina es la que va a causar daños en la salud de las personas, por desgracia es uno de los principales motivos de muertes en el mundo ser fumador ya sea activo o pasivo".
Un fumador pasivo expuesto al humo de tabaco durante una hora, inhala una cantidad equivalente a 2 o 3 cigarrillos. La irritación nasal, de los ojos y de las vías respiratorias con tos y flemas, son los síntomas más frecuentes asociados al humo del tabaco.
"Por desgracia en nuestro medio Colima estamos viendo que cada vez es más joven la población que se hace adicta a fumar, estamos viendo que es la adolescencia alrededor de los 14 o 15 años ya se inicia con esta adicción".
En la mujer, el tabaco, reduce la fertilidad, tiene mayor riesgo de tener abortos prematuros y espontáneos, produce hemorragias durante el embarazo y complicaciones en el parto. Cuando una mujer fuma durante el embarazo, el feto debe ser considerado fumador pasivo.
¿Qué hace para evitar caer en el tabaquismo? de acuerdo con la presidenta del Colegio de Médicos, Cristina Angélica Bayardo Quezada, es importante conocer qué es y las consecuencias de su consumo, cambiar de hábitos, realizar actividades nuevas, alejarse de los grupos de personas fumadoras, comer o masticar algo cuando llegue la ansiedad de consumir cigarro, realizar ejercicio, procurar una alimentación sana, acudir a recibir apoyo médico y lo más importante, tomar la decisión de alejarse de todo lo relacionado con el cigarro.