Sin ser una zona residencial los habitantes de las colonias populares que son denominadas con este segmento pagan el doble o más por servicios básicos.
"Nos hemos dado cuenta entre los vecinos esa parte de que el agua como el predial incluso la luz nos llega muy caro y a pesar de que no vivimos en una zona que realmente sea una residencia, es una colonia como cualquier otra popular pudiéramos decirlo".
Consideran que algunas de estas colonias no cumplen con el sello de residencial pues a pesar de que pagan más por los servicios no tienen una excelente calidad.
"Las calles están muy mal hechas, el empedrado brotado, hay pocas luminarias, también la cuestión del pago del agua la tarifa sí es muy alta".
En una colonia popular que no es denominada residencial el costo del agua es de 200 pesos por bimestre aproximadamente, mientras que en una colonia residencial se cobran hasta 400 pesos por el mismo periodo.
"Es una colonia que realmente está muy alejada, no tiene las condiciones como de ser residencial, pero sí tiene el nombre vaya y eso es lo que perjudica de una u otra manera a nosotros como colonos de ahí que aumenten los precios por ejemplo en este caso del agua".
De acuerdo con los instrumentos de planeación existen las zonas populares, medias y residenciales, que cada una con sus especificaciones es revisada por la autoridad municipal mediante el reglamento de construcción.
A esto se le suma que existe un rezago en la municipalización de colonias, por ejemplo en Villa de Álvarez, al 2020 el 47% de las colonias no estaban regularizadas, lo que se ha ido modificando, pues en 2022 se realizaron 22 municipalizaciones; en 2023 fueron 30 y durante este 2024 han sido regularizadas 24 colonias.