La bulimia y la anorexia son trastornos alimenticios que se caracterizan por comer demasiado y después vomitar o no ingerir la cantidad de comida que necesita el cuerpo para nutrirse, enfermedades que van en aumento en la población juvenil, porque buscan estar a la moda o siguen estereotipos, alertó la nutriologa Sol Pérez Aguirre, coordinadora del programa de alimentación y actividad física de la Secretaría de Salud.
"La parte de los adolescentes, porque es donde más incide el querernos ver bien, la parte física, el que los demás me vea bien o como me siento yo en mi autoestima, me siento gordito o me siento muy grande y entonces quiero hacer conductas que me lleven rápido a bajar o sostener mi peso".
Advirtió que aquellas personas que tienen obesidad y buscan tener un cuerpo sano y delgado puede caer en la bulimia o la anorexia al bajar de peso y hacerlo en poco tiempo, cuando normalmente es un proceso lento y controlado a menos que se recurra a la cirugía.
Algunas signos de alarma de trastornos alimenticios son: preocupación excesiva por el peso, por las calorías que consumen, leer al extremo las etiquetas de los alimentos, comer 1 o 2 veces al día en pocas cantidades y alimentos bajos en calorías, utilizar laxantes, hacer dietas extremas en poco tiempo y presentar un desgaste dental que se observa a simple vista, pero tanto la bulimia como la anorexia deben ser diagnosticadas y atendido por un grupo de médicos expertos, recomendó.
"Necesitamos un equipo multidisciplinario tanto es importante la parte farmacológica, la parte dietaria, como la parte psicológica, entonces se necesita un equipo multidisciplinario, que esté la paciente o el paciente en medio de todo esto para lograr una recuperación".