Los modismos y refranes mexicanos son una tradición de la población que pueden reflejar el nivel social y económico, si la persona proviene del campo o de alguna de las regiones del país.
La profesora investigadora de la Facultad de Letras y Comunicación de la Universidad de Colima, Lucila Gutiérrez Santana explicó que, aunque el refrán y el modismo se parecen, porque tienen una estructura que no cambia, el refrán tiene dos partes, rima y tiene un mensaje; mientras que el modismo no rima, no se puede traducir y se presta al albur.
"Hay expresiones que nos identifican como mexicanos en algunos casos como parte del occidente de México y dicen él es de Colima, porque dijo esta palabra habla cantadito o porque se viste de forma, pero lo que tiene que ver con lo que hablamos es lo que estudia la lingüística".
Los modismos no se pueden traducir literalmente, porque estarían diciendo una barbaridad, no se entendería lo que se quiere decir, un ejemplo de esta forma de hablar es la utilizada el 1 de diciembre por el presidente Andrés Manuel López Obrador quien al pronunciar su discurso indicó "me canso ganso", expresión que en ciertos niveles sociales generó críticas porque debe tener cierto nivel académico.
"Si es en un contexto demasiado formal como que choca o algunos les parece que se están saliendo del protocolo como lo que pasó, porque esperamos que en un contexto formal sea un lenguaje más académico todos los usamos porque son parte de nuestra cultura, son formas de compartir información, de compartir nuestra cultura y la forma de identificarlos".