dana (EFE).- El número de víctimas mortales del terremoto que el lunes pasado arrasó grandes partes del sureste de Turquía y el norte de Siria ya supera los 33.000, al haberse contabilizado casi 30.000 muertos solo en Turquía.
«Han perdido la vida 29.605 ciudadanos», indica el servicio de emergencias turco AFAD en un mensaje en Twitter este domingo.
A esto se añaden 3.575 fallecidos en Siria, según las últimas cifras contabilizadas en ese país.
Problemas con los servicios básicos
En muchas localidades siguen los problemas con los servicios básicos, con interrupciones del agua y la electricidad y con limitada asistencia médica. También hay escasez de determinados productos de higiene y medicamentos.
El presidente, Recep Tayyip Erdogan, declaró el sábado que todas las universidades pasarán a impartir enseñanza a distancia y que las residencias de estudiantes se entregarán a las víctimas del terremoto, al tiempo que prometió reconstruir todas las viviendas destruidas en el plazo de un año.
Las fuerzas de seguridad turcas arrestaron a al menos a 48 personas acusadas de saquear edificios dañados o intentar estafar a las víctimas en la región, informó la agencia de noticias Anadolu.
Dos de los detenidos supuestamente se hicieron pasar por trabajadores humanitarios y trataron de robar en seis camiones llenos de alimentos para las víctimas del terremoto en la provincia sureña de Hatay.