Macaria Santos es originaria de la comunidad indígena de Zacualpan y tiene 35 años elaborando trajes típicos para venderlos durante el Docenario Guadalupano. Tras dos años de pandemia y de suspensión de actividades, asegura sentirse emocionada y feliz por que retorna ésta celebración de manera presencial.
"En los anteriores cuando todavía no había permiso de vender aquí, yo rancheaba por las calles, por todas las calles de Colima y había unos que me hacían pedidos y ahí yo vendía. Un traje de india de 3 piezas, falda blusa y sabanilla, $3500"
Afirma estar orgullosa de ser una artesana de trajes de india, pues le ha permitido sacar adelante a sus 5 hijos, quienes dos de ellos ya son ingenieros, dos maestras y una contadora.
"Quisiera traer mucha familia que se, que se tienda a trabajar porque esto es un dinero y no lo larga uno a sus hijos, en casa borda, vienes, vas y no sueltas a los hijos y enseñarle a los hijos e hijas que ayuden, todos; mis nietas todos saben coser"
Macaria Santos estará instalada todos los días de este Docenario Guadalupano en el jardín Torres Quintero, en el centro de Colima, y espera que esta tradición perdure por muchos años.
"Sí porque todos tenemos mucha fe en la Virgen de Guadalupe y no se le pierde nunca la fe y así desde chiquitos, grandotes, de todos tamaños hacemos"