El mal de Chagas está considerado como uno de los problemas de salud más importantes y difícil de erradicar en América Latina, esto por su condición endémica en 21 países de este continente, con un riesgo de infección de al menos 110 millones de personas.
En México, se estima que existen 1.1 millones de personas infectadas, mientras que, en Colima, al menos el 2 por ciento de la población pudieran tener este mal, es decir, alrededor de 14 mil personas. Lo anterior, de acuerdo con las cifras oficiales de la Organización Mundial de la Salud.
La enfermedad se considera de manera histórica, un severo problema de salud en áreas rurales del país, con manifestaciones clínicas y características epidemiológicas variables, aunque, la transmisión por vector también se ha documentado en zonas urbanas.
El mal de Chagas está reconocido por la Organización Mundial de la Salud como una de las 13 enfermedades tropicales más desatendidas del mundo y por la Organización Panamericana de la Salud como una enfermedad desatendida de las zonas rurales y agrícolas de varios países.