Como una labor difícil, pero gratificante, que realiza por amor al prójimo es como describe José Manuel González Meza, el trabajo que desempeña desde hace más de 20 años en las playas de El Real en Tecomán rescatando personas del mar para evitar que mueran ahogadas.
En estos años explicó ha salvado de la fuerza del mar entre 50 a 60 personas entre ellas a cuatro de cinco miembros de una familia que llegó de vacaciones a Tecomán, pero desgraciadamente el padre murió para salvar a su hijo.
"Eran como unas cinco personas, de hecho cuando nos llamaron estaban flotando adentro tres niñas como de 15 años, una de 14 y otras de 15 años eran hermanas, el tío y su hijo como siete años, el papá por rescatar al hijo se metió y él es el que se ahogó, el hijo se quedó flotando arriba del papá".
Como este caso recuerda se han presentado otros en donde por no hacer caso a la banderola roja de no meterse al mar las personas se introducen dicen que a lo bajito y la corriente los arrastra hacia los pozos de donde después se les complica salir.
Ante situaciones como esta Manuel recomienda mantener la calma, levantar los brazos para pedir auxilio y una vez que los guardavidas está junto a la persona en problemas permitir que le coloque boca arriba en la boya o torpedo para que el cerebro se oxigene y poderlo sacar a tierra.
"Empezarle hacer los primeros auxilios en caso de que este desmayado o en schok darle los primeros auxilios hasta que llegue la atención médica que es cruz roja o protección civil y es lo que se requiere y se los entregamos".
Del oficio que ha elegido para ganarse la vida, Manuel González Meza aseguró lo seguirá haciendo con o sin paga, porque desea seguir sirviendo a la gente.
"Me encanta vivo aquí toda la vida en el mar y siempre me ha gustado salvar a la gente por eso estoy de guardavidas, es por eso que me gusta ¿qué siente cuando rescata a alguien ? es una satisfacción como que se siente bonito, se siente en el alma rescatar a una persona, porque tú conoces el mar y dónde están las corrientes".