Gracias a la utilización de modelos matemáticos, el investigador Mario Ortiz ha logrado conocer un poco más del comportamiento del COVID entre menores de 18 años. Lo cual se vuelve relevante este regreso a clases presenciales. Aunque no se atreve a proponer una fecha para un retorno seguro los modelos matemáticos le permiten señalar que los niños y niñas son más resistentes y rara vez se presentan una defunción.
Por ejemplo: Los niños menores de 14 años solo representan el 1.8% de los casos infectados en Nayarit. El riesgo de que un niño desarrolle una enfermedad grave que requiera hospitalización es 25 veces menor que en los adultos y el riesgo de muerte es 500 veces menor que en los adultos.
En otro análisis de niños entre 6 y 11 años que se contagiaron, encontró que: Los niños de 6 años dan cuenta de apenas el 0.05% de los casos confirmados en el estado. En cambio, el riesgo de contagio aumenta al triple para los niños de 11 años, con apenas un 0.16% de los casos confirmados en el estado. De todos los niños analizados solo uno fue hospitalizado. Ninguno ha fallecido hasta ahora.
En un tercer análisis en el que comparó lo sucedido en EUA durante el regreso a clases en 2020 encontró que: de cada 10 mil niños de 5 a 11 años solo se presentaron 36 casos COVID. Los pocos niños que fueron hospitalizados o que murieron tenían al menos una afección médica subyacente. En nuestro estado, de cada 10 mil niños de 5 a 11 años que no van a la escuela se presentaron 11 casos. Considera que durante el regreso a clases podría elevarse la cifra de contagios entre menores siempre y cuando no se establezca el uso del cubrebocas como obligatorio, por lo que recomienda educar al menor para que entienda la importancia de que mantenga el uso adecuado de este.