Rescatar a una perrita y sus cachorros que fueron abandonados sobre el camino Comala-Paredes-Agosto hace 3 años, así inició Sara Judith Cruz Sánchez su labor como rescatistas y del Albergue Sara Amor Canino, una de las actividades que le corresponde atender por ley a las autoridades municipales, pero no la cumplen.
"La verdad es muy difícil porque pues, yo trabajo con la ayuda de la gente ahorita no hay apoyo del gobierno, no me ha podido hacer asociación para ver si así puede haber más fondos para mejorar esto. / "Pues estamos al día con el alimento, porque no nada más es el alimento, sino la atención veterinaria, los medicamentos".
Actualmente tiene a su cuidado a 85 perritos y en los tres años como activista ha rescatado a casi 250 mascotas. El predio que ocupa el albergue es rentado y paga 2500 pesos mensuales, sin embargo busca obtener fondos para comprar un terreno y adaptarlo. Las donaciones de la gente es su principal apoyo, pero también vende plaquitas o hace rifas para obtener recursos.
"Ver la manera de conseguir los fondos para poder bardear el terreno nuevo para empezar y ya empezar a poner los techos porque ya viene la temporada de lluvias y eso es lo que me preocupa más, que no tienen dónde refugiarse del sol, ni de la lluvia", indicó Sara.
Indica que, lamentablemente, ninguna autoridad de Colima, Villa de Álvarez o Comala se ha acercado para ofrecer apoyo, pese a que esta actividad les corresponde realizarla por ley. No obstante, insiste que para ella el apoyo más valioso es el de la gente, a quien agradece infinitamente.
"Es una lucha de cada día estar pensando cómo hacerle, cómo para poderlo solventar y sacar adelante todos los gastos, porque a veces son cuentas veterinarias hasta de 15 mil, 20 mil pesos que se tiene que pagar, medicamentos que no son nada baratos", señaló.