Aura Belén López Trujillo es una joven profesionista, se recibió como química, farmacéutica, bióloga, quien después de su último trabajo duró varios meses sin poder conseguir empleo. Esta situación la llevó a vivir momentos de angustia y desesperación.
?Pues apoyarme con pedirle prestado a mi hermana y gente caritativa que me ayudaba porque no había de donde sacar/si hoy tenías 20 o 50 pesos a lo mejor mañana no entonces era como que comer muy limitado o a veces no comer, hubo días que no comía porque no tenía dinero?.
Como profesionista la falta de experiencia fue lo que le impidió acceder a un trabajo, mientras que en otros lugares, su nivel de estudios fue un obstáculo.
?El hecho de llevar solicitudes a todas partes desde una tiendita, una tienda departamental o una empresa más grandes, en algunos me decían que no me podían contratar porque tengo muchos estudios/dije tantos estudios y ahora me estorban para agarrar un mínimo empleo/si alguien tiene el estudio no les es suficiente porque no tienes la experiencia y como tenerla si no te dan la oportunidad para agarrar experiencia?.
Después tocar puertas en más de 20 lugares sin tener éxito, hace unas semanas Belén al fin logró adquirir un empleo, aunque como en la mayoría de los empleos de la entidad, no es el mejor remunerado.
Por fortuna la mujer logró conseguir un empleo en el que día a día se esfuerza para ganar más, sin embargo, basta con voltear hacia los cruceros, a los jardines o diversos puntos de la ciudad, para darse cuenta de la gran cantidad de vendedores ambulantes que bajo las inclemencias del clima exponen su integridad y en ocasiones desafían a la autoridad con tal de llevar el sustento al hogar.