Para el exdirector de Prevención y Readaptación Social, José Abel Saucedo Romero, en el CERESO de Colima los perfiles delictivos y violentos de los internos han rebasado la capacidad de control, supervisión, infraestructura y número de personal, desde hace tiempo, sin que se le invierta lo mínimo necesario en ninguno de estos ámbitos.
"Vamos a imaginar que haya recursos para hacer una bonita jaula y bueno la persona va a salir más brava, necesito entonces tener personal que haga tratamiento, psicólogos especializados, trabajadores sociales, de los cuales en un momento adolecía Colima y me imagino que sigue adoleciendo, obviamente que esto está dado porque se requieren recursos económicos y el gobierno no tiene para todo".
Explicó que en el 2007 eran pocos los internos por delincuencia organizada y para 2017 ya había cárteles con serias diferencias que van en aumento y tratan de ganar terreno no solo al exterior, sino al interior de los centros penitenciarios que aunado a las deficiencias de programas y acciones a nivel federal y la falta de recursos a nivel estatal, pues obviamente que los paganos son el personal que está resistiendo en el control del Centro penitenciario, peleando a mano limpia contra el uso de tecnologías más elevadas.
"No es posible que exista eso, algo está fallando, en cuanto al bloqueador del celular, yo se que cuesta dinero, pero claro que si ponemos unos buenos bloqueadores no van a poder comunicarse hacia el exterior, tenemos que invertirle, no se puede descuidar la seguridad, porque esas personas salen, salen como lo han hecho y salen a matar gente"
Al preguntarle sobre las movilizaciones que se dieron la tarde del martes tras el motín en el CERESO de Colima el criminologo y penitenciarista explicó tres posibles escenarios
"Hipotéticamente podríamos pensar en los siguientes escenarios, uno de ellos que hayan sido orquestado por algún grupo y que hayan por lo mismo tenido o fomentado algo que tenían estructurado acá afuera, la segunda es que en el momento en que se desarrollaron los hechos, los grupos, curiosamente se llaman delincuencia organizada, verdad, están tan bien organizados que en ese momento ya tienen indicaciones de lo que tienen que hacer y lo otro es una cosa muy distinta que no tenga nada que ver."
Saucedo Romero indicó que por el ángulo que se vea, el CERESO requiere invertir recursos para poder implementar lo que hasta hoy solo han pensado que se tiene que hacer.